Problemas Principales

En Harrisburg yo:

• Lucharé por las escuelas de Lancaster abogando por una financiación justa. La financiación justa no solo mejora la calidad de nuestras escuelas públicas y nivela el campo de juego en todo el estado, sino que también reduce la carga para los propietarios y hace que las viviendas sean más accesibles para todos los habitantes de Lancaster.
• Me opondré a la construcción y expansión de escuelas charter

Siempre me quedaré y apoyaré al equipo que creyó que diez años con mi madre era más que una línea presupuestal, era más que un recorte de impuestos para los ricos, era algo sagrado y que valía la pena proteger. He venido siendo un orgulloso partidario tanto de Hawk Faculty United, un esfuerzo por sindicalizar a la facultad de Harrisburg Area Community College, como de Nurses of Lancaster. Lucharé por:

• Aumentar el salario mínimo a $15/hora como mínimo en todo PA.
• El derecho de todo trabajador a sindicalizarse y a ejercer sus derechos colectivos.
• Proporciones seguras de dotación de personal para nuestros trabajadores de la salud.
• Poner fin al robo de salarios y la discriminación en el lugar de trabajo, así como a exigir igual salario por trabajos iguales.
• Inversiones en buenos trabajos sindicales para proyectos a largo plazo como la reconstrucción de nuestras carreteras y puentes y la transformación de nuestra infraestructura bajo un Green New Deal.
• Contra la consolidación de PASSHE y en apoyo de APSCUF.

Muchos líderes electos en nuestro Commonwealth piensan que la industria de los combustibles fósiles son necesario mal. Pero creo que podemos hacer algo mejor en nuestro estado. Frente a la catástrofe climática, debemos invertir en nuestras comunidades, rurales y urbanas, negras, blancas y marrones, para mitigar los impactos de esta crisis y crear millones de empleos sindicales bien remunerados en el proceso. En Harrisburg yo:

• Apoyaré una prohibición estatal de fracking.
• Trabajaré para desvincular nuestra economía de la extracción de gas natural.
• Lucharé por trabajos sindicales bien pagados que contribuyan a la transición de nuestro estado a energía renovable, restauración y preservación de nuestras tierras de cultivo, vías fluviales y otros recursos naturales; y hagan que nuestras comunidades sean resilientes frente al cambio climático.
• Lucharé para invertir en la modernización y construcción de la infraestructura necesaria para combatir la crisis climática y proveer a nuestras comunidades, tanto en vivienda como en transporte público y escuelas públicas.

Hay otras 53 ciudades como la nuestra, que se llaman de “tercera clase”, hogar de más de un millón y medio de residentes de Pensilvania. 53 ciudades que no pueden aumentar el salario mínimo, que están paralizadas en la forma en que se nos permite recaudar ingresos.

Al devolver el poder a la ciudad de Lancaster City así como a otras ciudades de tercera clase, nuestra ciudad podría:

• Diversificar nuestras fuentes de ingresos y disminuir nuestra dependencia de los impuestos a la propiedad, que sobrecargan de manera desproporcionada a las familias de bajos ingresos y a los propietarios de viviendas de raza negra y morena. Podríamos hacer esto aumentando el impuesto a los servicios locales y el impuesto sobre la renta del trabajo y agregando un impuesto comercial mínimo.
• Instituir un impuesto a la propiedad progresivo, de modo que no nos veamos obligados a aumentar los impuestos a nuestros residentes más vulnerables al mismo ritmo que a los más ricos.
• Aumentar el salario mínimo al menos $15 la hora.
• Instituir protecciones para los inquilinos, incluido el derecho de denegación del inquilino y sellar los registros de desalojo.

Una parte fundamental de la realización de un sistema tributario equitativo y la lucha por nuestras familias trabajadoras en Lancaster será tomar el poder de gobernar nuestra comunidad desde Harrisburg y traerlo aquí. Estoy comprometido a luchar por ciudades de tercera clase como la nuestra.